Cubierta de bosques, es un lugar de inigualable belleza, desde el que se divisa los dos mares del Estrecho.
De difícil acceso por carecer de carreteras, pudiéndose cruzar por los puerto de Anyera, en la carretera Ceuta- Tánger y por el paso de Tagramt, o rodearlo al Oeste, por la carretera de Alcázar Seguer a Tetuán.
En su interior se pueden descubrir lugares con gran encanto, destacando cerca de Tagramt, Hafa el Queddana y la Higuera, y el bello monte de Anaser que se divisa desde todo el Estrecho.